lunes, 30 de abril de 2012

Palabras a una cómplice.

Me consuela pensar qué, cuando ellos se fueron tú te quedaste. En lo que llevo de vida no he conocido persona como tú, tan importante, tan sumamente especial y a la vez rara. Que yo sé que estás ahí, no creo en un "siempre", pero estoy completamente segura de que permanecerás a mi lado notablemente más que otros personajes de mi vida. Y decir que, si no estuvieras ahí, quizá yo perdería todas mis batallas, o aún perdiendo sin ti quizá dejaría de luchar, siquiera me levantaría de cualquier caída. Y el tiempo pasa, pero no lo echo de menos contigo ahí. Tanto yo a ti, como tú a mi, nos juzgamos por nuestros actos, y sé que como humanos que somos cometemos errores, pero si te importo y me importas sé que pocas cosas podrían separarnos. En mi fallido intento de ser feliz, eres tú quién está para cogerme, para salvarme, para no dejarme caer. No miento cuando digo que no te dejaré caer, te lo digo con mis más sinceras y sensatas palabras. Puede que nunca tenga suficientes y exactas palabras para decir lo que significas para mi, ni suficientes hechos para agradecértelo, pero como ya sabrás esto es una lucha continua y desesperada por vivir, en la que te puedo decir que estaré a tu lado, solo si me dejas. Pero te escribo esto para que te hagas una idea de ello. Que yo quiero que seas feliz, con o sin mi, es lo que quiero. Que sé que no soy fácil de comprender, que tengo puntos raros y demás, pero te quiero lo mejor que puedo. Esto son palabras a una cómplice, a ti.

domingo, 29 de abril de 2012

Desearía que estuvieras aquí.

Y te sorprendería lo mucho que te extraño, lo mucho que te recuerdo. Sé que no serviría de nada decírtelo, que por eso no ibas a volver. Pero mi conciencia quedaría mucho más tranquila, te lo aseguro. ¿Y lo qué duele verte ahí, delante mío, y no poder hacer nada? Sé que para ti no es ninguna preocupación, ningún remordimiento. Que tú ya eres correspondido, y yo no puedo hacerle frente a eso. Reflexiono, me rayo, me pongo histérica solo de pensar que no quiero cariño que no sea el tuyo, que todos ellos no te sustituyen ni mucho menos. Y digo que te sorprendería, porque, me sorprende hasta a mi.

sábado, 14 de abril de 2012

Insustituible.

No sé el día exacto, solo sé que un día de primavera me di cuenta de que eras demasiado importante, que me marcaste, me hiciste ver que hay razones por las que seguir un sueño y que los detalles insignificantes son los que te hacen más irresistible. Quizá sea porque lo imposible se hace tentador. Ahora solo me quedan recuerdos, de todas aquellas palabras que decías, de promesas que dejabas caer como un "no cambies nunca" o un "muérdeme". Yo como una niña ilusa sonreía confiando en ti, pero el tiempo pasa para todos, y los caminos se separan. A tantos kilómetros de tus caricias no consigo olvidar, no sé si es porque no puedo o no quiero. No sé si debo agradecértelo o llorar por lo que nunca tuve, y aún con miedo de perderte sabiendo que ya estamos perdidos. Puede que sea tiempo o distancia lo que necesitemos, sé que no somos correspondidos, hoy no, mañana quien sabe. Yo te pido que no me olvides, ya que yo injustamente no consigo hacerlo. ¿Y qué nos queda? Varios kilómetros, un par de años, palabras y un poco de coraje. Solo espera bien y yo seré paciente para esperar tu impaciente boca sobre mi piel.

viernes, 13 de abril de 2012

Monotonía.

Siempre lo mismo, todas las semanas de mi vida, las mismas historias, la misma gente. Dicen que cuando algo es bueno no debería cambiar nunca, ¿pero es eso cierto? Yo no entiendo la vida, ni que papel tenemos en ella, yo solo reflexiono y pienso. Llega un día en el que te preguntas, ¿y esto es todo? Y si, me cansé, y desearía salir, e irme, pero no puedo. Solo tengo una posibilidad tragar y seguir con mi camino recto. Siempre diciendo que todo va bien sea cierto o no, básicamente no pasa nada nunca, pero es eso, que nada cambia y que todo cansa. ¿Yo soy feliz? Mi respuesta es "no lo sé". Autoengañandonos, siempre intentando complacer a alguien, sea quien sea. Quizá lo que más canse sea estudiar, trabajar, bueno todas esas cosas que la sociedad nos obliga a hacer, pero, ¿nos lo merecemos? No hablo ni de buenos ni de malos, hablo del valor de una vida, de una sola. Es un círculo, como si estuviéramos hechos para esto; ciérralo, no somos máquinas.

Tal y como quieras ser.

Voy a oírte, sin juzgarte. Voy a opinar, sin aconsejarte. Voy a confiar en ti, sin exigirte. Voy a ayudarte, sin intentar decidir por ti. Voy a cuidarte sin anularte. Voy a mirarte, sin proyectar mis ideas en ti. Voy a abrazarte, sin asfixiarte. Voy a animarte, sin empujarte. Voy a sostenerte, sin hacerme cargo de ti. Voy a protegerte, sin mentiras. Voy a acercarme, sin invadirte. Voy a conocer las cosas tuyas que más me disgusten, las aceptaré y no pretenderé que las cambies. Quiero que sepas, que hoy, hoy puedes contar conmigo. Sin condiciones.